Las organizaciones Greenpeace Argentina, Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) y la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas cuestionaron que el inventario de glaciares difundido port el gobierno nacional haya excluido a los que tienen menos de un kilómetro cuadrado de superficie.
“La publicación del inventario no sólo llega con años de demora sino que está incompleta, ya que no incluye a los pequeños glaciares que también deben ser contemplados y protegidos por la ley» dijo Gonzalo Strano, coordinador de la campaña de glaciares de Greenpeace.
En este aspecto reclamó que «todos los glaciares, sin importar su tamaño o composición, sean protegidos por la normativa nacional”.
Por su parte, Enrique Viale, representante de la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas, destacó que «el inventario está correcto pero incompleto. La ley es clara; en su artículo 2 establece que son objeto de protección todos los glaciares cualquiera sea su forma, dimensión y estado de conservación».
Agregó que el inventario «establece que tanto la mina Veladero como Pascua-Lama están asentados sobre glaciares y ambiente periglacial, por lo que están alcanzadas por la prohibición de cualquier actividad extractiva estipulada en el artículo sexto de la Ley. Es hora de su aplicación efectiva, no puede haber más dilaciones»
En tanto, Pía Marchegiani, directora de Política Ambiental de FARN, manifestó que el inventario debe ser complementado «con aspectos pendientes para que se ajuste a la ley».
«Además, esto debe ser realizado al mismo tiempo que se avance en la efectiva implementación de todas las medidas que impone la ley, como auditorias, cese y/o traslado de actividades en zonas prohibidas», argumentó.
Y destacó: «Es imprescindible que las autoridades dejen de ofrecer territorios para inversión minera en donde ya se identificaron glaciares y ambiente periglacial”.
En Argentina hay 16.986 glaciares en la Cordillera de los Andes y en las Islas del Atlántico Sur que ocupan una superficie de 8.484 kilómetros cuadrados, un tamaño equivalente a 41 veces la Ciudad de Buenos Aires, según el primer inventario de esas masas de hielo presentado hoy en la Casa Rosada.