DESCRIPCIÓN. Hembra: 70 cm. Macho: 60 cm. Al volar se la distingue por su silueta casi triangular, con alas largas y anchas, su cola muy corta y su pechera oscura; todo el cuerpo es gris metalizado, salvo el vientre blanco que esta finamente barrado de negro; patas amarillas. Juvenil: acanelado con ceja clara y pecho estriado de tono más oscuro; cola barrada; dorsal más oscuro.
COMPORTAMIENTO. Anda en pareja o solitaria. A menudo posada en lugares visibles como saliente rocosas o árboles secos. Suele volar en círculos a gran altura o planear suavemente sobre los campos.
HÁBITAT. Presente en casi todos los ambientes; prefiere lugares abiertos, como acantilados, sierras y cercanías de éstas, donde encuentra sitios más accesibles para la nidificación.
ALIMENTACIÓN. En épocas de abundancia de presas caza principalmente liebres y otros roedores, a veces aves. En momentos de escasez se conforma con carroña de vacas u ovejas lo cual motiva la creencia equivocada de que mata al ganado doméstico.
NIDO. Es una gran plataforma de palos y ramas que coloca en árboles, paredes rocosas o acantilados. Allí coloca 2 ó 3 huevos blancos con manchas ocres. Los pichones nacen y son alimentados por sus padres durante un largo período con presas que éstos llevan al nido. Los pichones permanecen en él hasta completar la totalidad de su plumaje.
SITUACIÓN. Escasa. A veces es perseguida por la gente de campo, que no conoce los beneficios que la rapaz proporciona al campo. Sus poblaciones actuales no presentan riesgo de conservación.
DISTRIBUCIÓN. Se la ve en el oeste de América del Sur y en la totalidad de Argentina, más frecuentemente en el sur de la provincia de Buenos Aires.
Fuente: Jumara.com.ar
Fotografía de Enrique Sanz